Ni los millonarios spot publicitarios, ni los avisos pagados en los medios de comunicación, ni los afiches multicolores pegados en las vitrinas de la dirección en todas las II.EE del país, bajo pena de sanción a los directores en caso no lo hagan, ni los llamados de agentes del Banco de la Nación, como en el caso de este artículo publicado por la fuente señalada, han terminado por convencer al magisterio nacional en su mayoría, salvo algunos desubicados ha inscribirse para la estafa de la llamada incorporación a la carrera pública magisterial.
Lo que viene sucediendo en AUCAYACU, es no sólo un buen síntoma, sino un indicador de lo que viene repitiéndose en todo el país.
Esta vez, ni Chang Escobedo ni sus Vice ministros, como acostumbraban salen a anunciar cifras de los inscritos, por que su escasa convocatoria les viene enfermando. Allí radica su sepulcral silencio, que no se prolongará por mucho tiempo.
Si postergan la fecha de inscripción, que vence el 5 de Junio, hay que considerar desde ya su fracaso. Por nuestra parte hay que persitir luchando en el esclarecimiento de esta estafa, que no vencerá a la inteligencia de los maestros.
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